jueves, 22 de enero de 2015

Y de repente...


Y de repente,
entre el ruido de motores,
el griterío de la chiquillería,
el eco de los pasos acelerados
y el roce de las hojas movidas por el aire;
el silencio
y la soledad,
la certeza absoluta
de que todo está perdido.

martes, 13 de enero de 2015

En el sillón negro.


Déjame imaginarte
tomando el sol,
sentada en el sillón negro,
frente a los ventanales,
mientras te miro
ensimismado;
el lápiz inmovil,
el cuaderno en blanco.


En mi vertiginosa carrera
hacia el
despropósito
he ido perdiendo casi
todos
mis sueños.


Así que, tan sólo, permíteme
eso:
Pensar que es posible
algo de luz
en la más absoluta negrura.