en lo más íntimo
de la noche en vela
surge tu imagen
Vienes de mar con tu voz verso;
la piel de agua viva engañando al sol,
secreta la mirada de tus labios,
cerrados los ojos sobre la arena.
Vienes de la mañana en la distancia,
de la palabra escrita contra el kilómetro,
del paseo lento entre el silencio
de palabras que ya nacieron huérfanas.
Vienes de la tarde en la penumbra,
de una casa que susurra aún posibles,
de la dulzura de una luz adivinada
que engalana los sueños con tu mejor vestido.
Vienes de la noche del tiempo ayer,
acompasas tu paso y te me quedas mirando;
abro la boca pero me callo lo importante.
Yo me quedo inmóvil. Y tú ya no estás.
Vienes del mar con tu voz de verso.
El corazón tiembla en vano.
2 comentarios:
El mío no lo vayas a borrar. El poema es bonico.
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