Dos poemas distintos que juegan con la misma metáfora.
(Escombros 1)
Hay un terremoto
en nuestros sueños
y un alba de ojos cerrados
envuelta en el polvo
que se levanta
sobre los cascotes.
Entre el escombro de
los instantes eternos,
nuestros cuerpos pierden
el equilibrio y caen junto a
la mente abandonada.
los instantes eternos,
nuestros cuerpos pierden
el equilibrio y caen junto a
la mente abandonada.
(Escombros 2)
Triste y áspera,
como la vida,
esta mañana en la que
todo huele
a fugacidad.
Fantasmagoría de
los días enterrados
y los pasos perdidos
allí,
donde el deseo
se hace
escombro
y donde
la imagen
del amor
aparece
codificada.
como la vida,
esta mañana en la que
todo huele
a fugacidad.
Fantasmagoría de
los días enterrados
y los pasos perdidos
allí,
donde el deseo
se hace
escombro
y donde
la imagen
del amor
aparece
codificada.
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